Un nuevo reloj en tres versiones: Ahoi Atlántico, Ahoi fecha Atlántico y Ahoi neomatik Atlántico de NOMOS Glashütte. Tres elegantes modelos versátiles para cualquier momento que también disfrutan con los deportes y el agua. ¿La diferencia entre ellos? El calibre: a la izquierda, el probado movimiento automático propio de NOMOS con y sin indicador de fecha; a la derecha, el reloj con tecnología automática extrafina (neomatik) y un diámetro ligeramente inferior.
Los nombres completos de estos relojes son Ahoi Atlántico, Ahoi fecha Atlántico y Ahoi neomatik Atlántico y son sumergibles hasta 200 metros de profundidad. Los dos primeros utilizan el calibre propio DUW 5001 y el movimiento DUW 5101 con fecha y tienen una caja un poco más grande, mientras que el Ahoi neomatik Atlántico es más pequeño y cuenta con la nueva tecnología automática y fina de NOMOS Glashütte. Los tres incluyen una correa de tela tejida de forma exclusiva en Francia para NOMOS Glashütte.
Muy diferente y refrescante: así es el reloj Ahoi Atlántico de NOMOS Glashütte. Las manecillas de las horas y los minutos están rodiadas. La tipografía blanca sobre la esfera azul atlántico facilita su lectura a través del cristal de zafiro con revestimiento antirreflectante azul por ambos lados. También se puede observar la protección de la corona.
El fondo revela una visión fascinante del calibre automático de NOMOS Glashütte, muy preciso, con ajuste en seis posiciones y decorado de forma lujosa. Se fabrica en el propio taller de NOMOS Glashütte. La pequeña ballena indica una resistencia al agua superior: hasta 20 atm, es decir, 20 bares o 200 metros.
Las manecillas de las horas y los minutos del nuevo NOMOS Ahoi Atlántico están rellenas de pintura blanca fluorescente Superluminova. Presenta un efecto muy bonito y práctico: los números e indicadores de hora brillan con un tono verde en la oscuridad.
La corona del nuevo NOMOS Ahoi Atlántico cuenta con una resistente protección contra accidentes. El fondo de cristal de zafiro, apuntalado por seis tornillos y la corona de rosca, asegura la resistencia al agua de la caja, que es de 20 atm, es decir, 20 bares o 200 metros: todas estas unidades son equivalentes. La fina caja de acero con flancos verticales está tan pulida que brilla, además de proteger el eficiente calibre propio de NOMOS.